
Ni la presidente Cristina de Kirchner ni Sergio Massa, jefe del Gabinete de Ministros, superiores de Graciela Ocaña cuando era ministro de Salud, aprobaron el pedido que ella hizo de declarar en tiempo y forma la emergencia sanitaria ante la epidemia de gripe porcina o influenza A.
El coordinador de Epidemiología del Comité de Emergencia Sanitaria de la Nación, Jorge San Juan, señaló que la ex ministra de Salud Graciela Ocaña había sugerido suspender las elecciones a raíz del avance de la gripe A.
"La ex ministra Ocaña pidió la suspensión de las elecciones y nosotros lo sugerimos en las reuniones de expertos. Pero era una decisión política, no una decisión nuestra", aseguró San Juan.
Pero, ¿a quién podía solicitarle las medidas Ocaña? A sus superiores, que eran el jefe de Gabinete, Sergio Massa; y la presidente Cristina de Kirchner, a quienes evidentemente les caben las responsabilidades principales.
En declaraciones radiales, San Juan, también médico infectólogo del hospital Muñiz, consideró que las elecciones retrasaron la toma de algunas medidas, como la declaración de la emergencia sanitaria.
San Juan afirmó que "se pidió la emergencia sanitaria en tiempo y en forma" y aseguró que si se hubiera dictado la medida en ese entonces, hubiera "permitido manejar fondos libremente", para tomar precauciones que impidieran el crecimiento de la epidemia.
La información se da a conocer un día después de que Ocaña renunciara a la cartera de Salud, en momentos en que la gripe A N1H1 se expande en el país.
Anteriormente, la ministra tenía la intención de declarar la emergencia sanitaria cuando el dengue comenzó a convertirse en epidemia, pero en el Senado, el bloque kirchnerista frenó la votación de la medida.
Por la demora en tomar ambas decisiones, Ocaña, también ex interventora del PAMI, fue blanco de críticas de distintos sectores, promovidas en parte por el líder sindical oficialista, Hugo Moyano, quien ambiciona el completo control del dinero derivado a las obras sociales.
Tras su alejamiento del Gobierno, Ocaña fundaría una asociación sin fines de lucro para luchar contra los manejos irregulares en el mercado de medicamentos, en consonancia con el enfrentamiento que mantuvo durante su gestión con el Secretario de Servicios de Salud, Héctor Capaccioli.
El lunes, Ocaña formalizó su renuncia ante la presidenta Cristina Kirchner durante una reunión, ya que la decisión estaba tomada antes de las elecciones, pero la ministra prefirió esperar a después de los comicios.
Cobos: "No era escuchada" en el Gobierno
El vicepresidente Julio Cobos se solidarizó con Graciela Ocaña y defendió su gestión con críticas a la presidenta Cristina Kirchner, a quien cuestionó por no haberla "escuchado" y por haber "limitado" sus atribuciones.
"Rescato la labor de la ministro de Salud que actuó bien, limitada a veces por las atribuciones, o por la confianza que se le puede haber dispensado", señaló Cobos en declaraciones realizadas anoche a un canal de televisión.
Incluso, el titular del Senado opinó que el motivo de su renuncia "no fue el tema de la gripe A", sino que recordó que "ella venía planteando diferencias sobre todo el manejo de las obras sociales" por lo que "ahí está el meollo de la cuestión".
"Creo que Graciela Ocaña no era muy escuchada, por lo que tengo referencias de algunos funcionarios. Ella hizo mucho a lo largo de su gestión en el PAMI, hizo una muy buena gestión y luego en el Ministerio, conforme al límite de sus posibilidades, su gestión fue más que aceptable", evaluó Cobos.
El coordinador de Epidemiología del Comité de Emergencia Sanitaria de la Nación, Jorge San Juan, señaló que la ex ministra de Salud Graciela Ocaña había sugerido suspender las elecciones a raíz del avance de la gripe A.
"La ex ministra Ocaña pidió la suspensión de las elecciones y nosotros lo sugerimos en las reuniones de expertos. Pero era una decisión política, no una decisión nuestra", aseguró San Juan.
Pero, ¿a quién podía solicitarle las medidas Ocaña? A sus superiores, que eran el jefe de Gabinete, Sergio Massa; y la presidente Cristina de Kirchner, a quienes evidentemente les caben las responsabilidades principales.
En declaraciones radiales, San Juan, también médico infectólogo del hospital Muñiz, consideró que las elecciones retrasaron la toma de algunas medidas, como la declaración de la emergencia sanitaria.
San Juan afirmó que "se pidió la emergencia sanitaria en tiempo y en forma" y aseguró que si se hubiera dictado la medida en ese entonces, hubiera "permitido manejar fondos libremente", para tomar precauciones que impidieran el crecimiento de la epidemia.
La información se da a conocer un día después de que Ocaña renunciara a la cartera de Salud, en momentos en que la gripe A N1H1 se expande en el país.
Anteriormente, la ministra tenía la intención de declarar la emergencia sanitaria cuando el dengue comenzó a convertirse en epidemia, pero en el Senado, el bloque kirchnerista frenó la votación de la medida.
Por la demora en tomar ambas decisiones, Ocaña, también ex interventora del PAMI, fue blanco de críticas de distintos sectores, promovidas en parte por el líder sindical oficialista, Hugo Moyano, quien ambiciona el completo control del dinero derivado a las obras sociales.
Tras su alejamiento del Gobierno, Ocaña fundaría una asociación sin fines de lucro para luchar contra los manejos irregulares en el mercado de medicamentos, en consonancia con el enfrentamiento que mantuvo durante su gestión con el Secretario de Servicios de Salud, Héctor Capaccioli.
El lunes, Ocaña formalizó su renuncia ante la presidenta Cristina Kirchner durante una reunión, ya que la decisión estaba tomada antes de las elecciones, pero la ministra prefirió esperar a después de los comicios.
Cobos: "No era escuchada" en el Gobierno
El vicepresidente Julio Cobos se solidarizó con Graciela Ocaña y defendió su gestión con críticas a la presidenta Cristina Kirchner, a quien cuestionó por no haberla "escuchado" y por haber "limitado" sus atribuciones.
"Rescato la labor de la ministro de Salud que actuó bien, limitada a veces por las atribuciones, o por la confianza que se le puede haber dispensado", señaló Cobos en declaraciones realizadas anoche a un canal de televisión.
Incluso, el titular del Senado opinó que el motivo de su renuncia "no fue el tema de la gripe A", sino que recordó que "ella venía planteando diferencias sobre todo el manejo de las obras sociales" por lo que "ahí está el meollo de la cuestión".
"Creo que Graciela Ocaña no era muy escuchada, por lo que tengo referencias de algunos funcionarios. Ella hizo mucho a lo largo de su gestión en el PAMI, hizo una muy buena gestión y luego en el Ministerio, conforme al límite de sus posibilidades, su gestión fue más que aceptable", evaluó Cobos.
"DENUNCIAN AL MATRIMONIO KIRCHNER POR "ATENTADO A LA SALUD PÚBLICA"
La demanda fue presentada este jueves (02/07) por el abogado porteño Alejandro Sánchez Kalbermatten ante el juzgado federal de Norberto Oyarbide. Según el letrado, el matrimonio K habría incurrido en "atentado a la salud pública" al no postergar las elecciones legislativas del domingo pasado.
Cristina de Kirchner y su marido, el diputado electo Néstor Kirchner, fueron denunciados este jueves (02/07) en la Justicia Federal por supuesto "atentado a la salud pública" al no haber postergado las elecciones legislativas del domingo pasado como lo habría sugerido la ministra saliente de Salud, Graciela Ocaña.
Fuentes judiciales informaron que la denuncia fue radicada por el abogado porteño Alejandro Sánchez Kalbermatten en el juzgado federal número cinco de Norberto Oyarbide, quien, en un trámite poco usual por su celeridad, lo citó de inmediato para que la ratificara, según publicó Crítica Digital.
La presidente y el ex presidente "persistieron con sus propósitos electoralistas, librando a su suerte a la población argentina y a los ciudadanos que la componen", consignó la denuncia y opinó que "siendo el voto obligatorio, no se hizo otra cosa que forzar a los ciudadanos de todo el país a contagiarse" la enfermedad, que causó hasta ahora la muerte de 44 personas.
"La necesaria concentración de grandes multitudes es precisamente opuesto a lo que se ha aconsejado en países serios para evitar la propagación de la enfermedad", sostuvo en la denuncia y señaló que manteniendo la convocatoria a elecciones "lejos de evitar las consecuencias de la pandemia, profundizaron y agravaron la situación".
Según el denunciante, el matrimonio presidencial podría haber incurrido en los delitos de "atentado a la salud pública" e "incumplimiento de los deberes de funcionario público" con consecuencia de muerte.
Cabe destacar que el artículo 102 del Código Penal reprime con reclusión o prisión de tres a quince años "al que propagare una enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", y el artículo 84 reprime con penas de seis meses a diez años al que por "imprudencia, negligencia, impericia en su arte o profesión o inobservancia de los reglamentos o de los deberes de su cargo, causare a otro la muerte".
Sánchez Kalbermatten también solicitó al juez que ordene al Poder Ejecutivo que "se dispongan de inmediato aquellas medidas que se estimen conducentes para evitar que se siga propagando el contagio de este virus mortal que azota al mundo y especialmente a la República Argentina" al tiempo que notifique a la Presidente que debe obligar al Ministerio de Salud de la Nación que "en forma gratuita suministre vacunas y demás medicamentos a los ciudadanos, garantizando la existencia de derechos".
Fuentes judiciales informaron que la denuncia fue radicada por el abogado porteño Alejandro Sánchez Kalbermatten en el juzgado federal número cinco de Norberto Oyarbide, quien, en un trámite poco usual por su celeridad, lo citó de inmediato para que la ratificara, según publicó Crítica Digital.
La presidente y el ex presidente "persistieron con sus propósitos electoralistas, librando a su suerte a la población argentina y a los ciudadanos que la componen", consignó la denuncia y opinó que "siendo el voto obligatorio, no se hizo otra cosa que forzar a los ciudadanos de todo el país a contagiarse" la enfermedad, que causó hasta ahora la muerte de 44 personas.
"La necesaria concentración de grandes multitudes es precisamente opuesto a lo que se ha aconsejado en países serios para evitar la propagación de la enfermedad", sostuvo en la denuncia y señaló que manteniendo la convocatoria a elecciones "lejos de evitar las consecuencias de la pandemia, profundizaron y agravaron la situación".
Según el denunciante, el matrimonio presidencial podría haber incurrido en los delitos de "atentado a la salud pública" e "incumplimiento de los deberes de funcionario público" con consecuencia de muerte.
Cabe destacar que el artículo 102 del Código Penal reprime con reclusión o prisión de tres a quince años "al que propagare una enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas", y el artículo 84 reprime con penas de seis meses a diez años al que por "imprudencia, negligencia, impericia en su arte o profesión o inobservancia de los reglamentos o de los deberes de su cargo, causare a otro la muerte".
Sánchez Kalbermatten también solicitó al juez que ordene al Poder Ejecutivo que "se dispongan de inmediato aquellas medidas que se estimen conducentes para evitar que se siga propagando el contagio de este virus mortal que azota al mundo y especialmente a la República Argentina" al tiempo que notifique a la Presidente que debe obligar al Ministerio de Salud de la Nación que "en forma gratuita suministre vacunas y demás medicamentos a los ciudadanos, garantizando la existencia de derechos".