martes, 3 de noviembre de 2009

COMO ALFONSÍN EN EL 94, DUHALDE ENTREGA AL PERONISMO EN EL 2011

Todas las encuestas dicen que el 2011 no está para el peronismo. Y Duhalde sabe que la gente no lo acompañará en ninguna aventura electoral. Su opción es clara: el próximo turno es para Julio Cobos. Está confiado en que, desde la derrota, tendrá la posibilidad de reconstruir al peronismo.




Eduardo Duhalde es un hombre de pocas ideas. Pero eso sí: fijas. Nadie puede sorprenderse de su visión bipartidista de la política. Incluso cuando fue gobernador de Buenos Aires, y mientras Carlos Menem avanzaba sobre todo aparato radical que tuviera a su alcance y no se domesticara, Duhalde pactó con la UCR y les dio el dominio de todos los órganos de control de la provincia. Le dice a lo suyo “visión estratégica”. Genuinamente, cree en un acuerdo irrevocable entre los dos partidos mayoritarios de la Argentina, para garantizar la gobernabilidad. La alternancia, cree, es la ofrenda para darle sustentabilidad política al país; lo único que puede ponerle freno a los intentos hegemónicos –o sueños de quedarse por siempre y jamás- de cada presidente argentino.

Cuando Alfonsín fue obligado a dejar anticipadamente el poder por el peronismo y los resortes de poder económico, padeciendo el desprecio de la población y la diatriba generalizada, encontró en Duhalde a un político que cobijó a sus cuadros y a un hombre con quien fue construyendo una amistad, cimentada por el diálogo y la comprensión mutua. Tenían a Menem como enemigo común. Y padecían una compleja relación con la ciudadanía, enamorada del uno a uno y las relaciones carnales con los Estados Unidos. Ninguno de los dos comulgó jamás con esas heterodoxas visiones.

Decidido a quedarse en la Presidencia de la Nación, Menem aceptó un acuerdo con el radicalismo para reformar la Constitución Nacional. A cambio de la inclusión del artículo que lo facilitaba, Alfonsín obtuvo buena parte de sus demandas institucionales: períodos presidenciales de cuatro años, sistema semiparlamentario, tercer senador por distrito, injerencia partidaria en las designaciones judiciales, por listar algunos temas. Es que sabía que no existía la posibilidad de que el presidente elegido en el 95 fuera radical. Así fue decidió perder ese turno, y apostó todas las fichas al 99 cuando, estaba seguro, una UCR reconstruída tendría chances de ganar.

Hay que reconocerle que mucho no se equivocó. El 99 fue para Fernando De la Rúa, aunque tuvo que compartir el poder con el FREPASO, surgido precisamente como fuerza política alternativa entre el 95 y el 97 frente al “Pacto de Olivos”.
Duhalde está en la misma. Todas las encuestas dicen que el 2011 no está para el peronismo. Como Alfonsín en el 94, y más allá de cualquier declaración en contrario, Duhalde sabe que la gente no lo acompañará en ninguna aventura electoral. Y que descartado Reutemann, los candidatos Macri y De Narváez, con posibilidades reales de hacerse de la presidencia según las encuestas y que podrían contar con el respaldo del peronismo, no quieren saber nada de mostrarse con él. Esto, lógicamente, lo hiere. Entonces, su opción es clara: el 2011 tiene que ser para Julio Cobos. Está confiado en que, desde la derrota, tendrá la posibilidad de reconstruir al peronismo tal y como a él le gusta: sin mucha gracia pero tampoco sorpresas, sin vuelo pero seguro, ordenadito y con poco ruido, respetando lo que hay, transformando nada, atajando osados, promoviendo mediocres. Y, cada tanto, dejándose llevar a cualquier equivocación, cuando se enamora de algún “genio” que le sabe entrar. Algo que, efectivamente, sucede pocas veces.

En un país gobernado por los Kirchner, la visión duhaldista de la política lo colocó en un santuario. Entre el estratega y el salvador, Duhalde es el depositario hasta de atributos mágicos para “sacarnos al loco” que él inventó. Aunque lo correcto hoy sería decir: FUE el depositario. Los empresarios reunidos en IDEA, que esperaban ansiosos su discurso, quedaron innegablemente defraudados por su discurso simplón, donde quiso parecer un estadista, y se mostró como un hombre corto (muy tímido), sin vuelo (pretendiendo que había leído algún libro en su “exilio” político), astuto conocedor de los intersticios de la política (usó el encuentro empresario como plataforma de lanzamiento), pero sin carisma ni brillo. O sea: Duhalde.

Pero él nunca miente. La vida color K fue lo que catapultó al abogado de Lomas de Zamora en un imaginario imposible. Por eso poco se recuerda las condiciones con las que se votó en el 2003: bajo un pastiche electoral, que era una interna abierta, obligatoria y simultánea, pero no para elegir candidato, sino para elegir presidente. La inventó él y se lo toleró.

Así que a no asombrarse que Duhalde esté decidido a sacrificarse en una interna contra Kirchner. Le gane o no, logrará peronismo detrás, limar las posibilidades de Macri y De Narváez, y ayudar a que Cobos sea Presidente. Su sueño, finalmente, es morir como Alfonsín: ya que en vida no logra la comprensión de las mayorías, ser acompañado por multitudes de todos los partidos hasta su sepultura es lo que le permitirá entrar en la historia por la puerta grande. Y no es chiste. Sin rubores, comentó este anhelo entre familiares.

El escollo

Paradójicamente, son los propios radicales el principal escollo a vencer. No todos están convencidos de que podrán acordar una reforma política con Kirchner sin pagar un alto costo en la opinión pública. Temen que, finalmente, le abran de nuevo el paso a una tercera fuerza, y queden fuera de juego. Sin embargo, hay que creerle a Duhalde, otra vez dispuesto al sacrificio. Como cuando no deshizo su promesa y desistió de competir en una elección para presidente en el 2003 que tenía asegurada. Aunque, claro, la ciudadanía no siempre paga. Ese episodio quedó más o menos en la prehistoria. Y nadie se acuerda que él cumplió con su palabra. Mientras los radicales debaten acerca de qué hacer, ni los Kirchner están de ánimo para festejar sus últimas victorias políticas. El escenario es de tal incertidumbre, que ni siquiera ellos, que manejan todos los resortes del poder, pueden dormir tranquilos. Como dice Lilita: “noviembre será terrible”. Ojalá se equivoque.
Por Silvia Mercado
COMENTARIOS
pais de poca memoria
02-11-2009 19:50
Duhalde no puede retirarse ¿no entienden que necesita colocar alguien en el poder que le garantice impunidad? Es narco y de los buenos!! siempre que haya un recambio de gobierno él va a colocar a alguien y después lo va a voltear via saqueos y conspiraciones, tiene que mantener a toda costa su cartel.

daniel02-11-2009 15:13
si gana K sigue el desastre si gana Cobos otra el desastre que paso con Alfonsín, se lo fuman en 2 años, impresentables

edu01-11-2009 23:04
Que buen Peronista el amigo Duhalde. Para renacer necesita ayudar a que el peronismo pierda. Eso lo aprendió de Menem ??? cuando De la Rúa. Duhalde si te retiraste cumplí con tu palabra, una vez al menos. El que puso dólares ..... ???? En el Peronismo nos arreglamos solos, andá a pasear con Chiche..

Ernesto01-11-2009 21:25
No me sorprendería q este chanta pretenda ayudar a los radicales a llegar, y después hacer todo lo posible para sacarlos del gobierno, y así deshacerse del radicalismo por otros 5 o 6 años mas. es un hijo de puta como el que gobierna ahora y que él puso. Cuidado radicales, ojala lleguen. Pero permanezcan. Prueben con tornillos en el sillón de Rivadavia.

af01-11-2009 18:04
Si hay internas radicales, onda Cobos o Carrio... es obvio que gana Carrió. A no olvidarse que a Cobos también le financió la campaña el narcotráfico! y a la gente le pregunto: realmente creen que Cobos no sabía lo de la 125, ley de medios, etc?????flor de boludo si no lo sabía..
Apoyó siempre al kirchnerismo hasta que se dio cuenta que el viento soplaba para otro lado.
por dios, abran los ojos!!! por qué tomamos como palabra santa lo que dice Duhalde??? no se olviden que estuvo detrás de los 2 golpes de estado que derrocaron a De la Ruina y Rodríguez Saa. Trajo el narcotráfico a Lomas de Zamora igual que Aníbal Fernández a Quilmes!! Que se vayan todos se refiere a toda la clase política de la vieja política!!!! eso lo incluye al cabezón que se la quiere dar sabio... si sabio para robar!!

Alberto01-11-2009 16:21
Muy buena información sobre el pasado reciente, pero el análisis falla desde el título: NO SE PUEDE ENTREGAR LO QUE NO SE POSEE, y menos en el peronismo.

Rodrigo01-11-2009 16:09
Ojo, no quiero decir que Cobos debe ser el candidato. Cobos el es nuevo De La Rua. No tiene opinion propia, ni sabe que hacer. Dejó Mendoza destruida y es una figura mediática, nada más. No representa al verdadero Radicalismo.

carlos01-11-2009 15:55
Realmente hace más de 20 años que el peronismo gobierna el país, como la provincia de buenos aires, con dirigentes políticos mas ricos y dirigentes sindicales también, que no representan el verdadero sentir y necesidad de la gente.
No tienen a quien echarle la culpa, porque nadie cree en lo que dicen, solamente mantenerse en el poder y así tener un cumulo clientelista para que los voten y opinen a favor.
Realmente este País no cambiara nunca mientras se mantengan los mismos dirigentes, siempre cambiando de caballo a mitad del rio, como ya vemos y hemos visto.
Es hora que este manso pueblo reaccione y opte por una nueva conducción política de verdad.
En un país donde realmente funcionen las instituciones y los poderes sean realmente independientes esto no pasaría ni 24 horas

Rodrigo01-11-2009 15:55
Ana, además la UCR y sobre todo los que queremos continuar el legado de Alfonsín tenemos visiones y queremos políticas de centro izquierda no las de derecha de Carrio con Prat Gay y Bullrich. Por algo Carrio está cada vez más cerca del Pro. Hasta los apoya con las mentiras del espia que utiliza Macri para espiar opositores.

Rodrigo01-11-2009 15:52
Ana, que tiene que ver recuperar la Gloriosa UCR con ir con Carrio? Creo que todo lo contrario. Recuperar el Radicalismo y el legado de Alfonsín es un partido con Democracia y respeto por las instituciones. Carrio es déspota, autoritaria, antidemocrática y no respeta las instituciones.

Facundo01-11-2009 15:36
Bien Dr. Duhalde, confiamos en usted. El país lo necesita y usted ya dio muestras de la capacidad de conducción que tiene. Que no olviden estos maracanases de la UCR y de los demás sectores que solo usted pudo sacar al país del pozo ciego donde ellos lo habían metido.Adelante Dr.!!!!!!!

marcelo01-11-2009 15:00
Soy radical, pero Duhalde me parece lo mejorcito y más brillante q saco el peronismo en los últimos 30 años. Su presidencia fue la que mayor cantidad de políticas a largo plazo fijo después de Alfonsín, y estableció las bases de la recuperación económica. Así que, bienvenido de vuelta, Dr. Duhalde